background image
La ufología es una afición cuyo hábito por el coleccionis-
mo (desde recortes periodísticos hasta casos “inexplicados”)
le valió alguna vez ser comparada con la filatelia... Pues
bien: de unir esta última con la ufología surgen algunos de
los artículos más curiosos jamás escritos sobre ovnis. ¡Se-
llos con platillos! El “non plus ultra” de los coleccionistas.
El primer avistamiento de un ovni filatélico tuvo lugar en
1975 en Guinea Ecuatorial. Aquel año, nuestra antigua
colonia emitió una serie de sellos dedicada a la colabo-
ración espacial entre los Estados Unidos y la Unión So-
viética (Y&T 65), y allí, junto a Gagarin, Glenn y el
Apolo 11, aparecían dos sellos con imágenes de plati-
llos volantes, bajo el epígrafe “Colaboración Interpla-
netaria”.
En el primero de ellos, con un valor facial de 15 ekue-
le (la moneda local) podemos ver un primer plano del
“platillo” fotografiado por Adamski. El diseñador no
dudó en mejorar el original añadiendo varias esferas más
en la parte inferior. Al fondo podemos ver dos platillos de
otro tipo, idénticos a los aparecidos en la portada del pri-
mer número de la revista FATE que recogía aquel primi-
genio encuentro ovni de la historia: el de Kenneth Arnold
el 24 de Junio de 1947. Tampoco aquí dejó el anónimo di-
señador de “mejorar” el original, añadiendo unas estelas
como de motores a reacción, jamás descritos por el tes-
tigo.
No he sido capaz de identificar en qué caso se basó el
diseñador del segundo sello, con un valor facial de 20
ekuele y que muestra unos platillos del tipo “Saturno”
pero con sendos reactores cilíndricos a cada lado.
Tendrían que pasar tres años hasta el siguiente avis-
tamiento, pero mereció la pena. Se trata de la primera se-
rie dedicada específicamente al fenómeno ovni (“Research
into U.F.O.’s
” es el pie de viñeta). El primer ministro de
Granada, una diminuta isla del Caribe, Sir Eric Gairy, lo-
gró que el fenómeno ovni fuese discutido en las propias
Naciones Unidas: un Comité Político Especial se reunió
el 27 de noviembre de 1978 para escuchar las exposi-
ciones de Jacques Valleé, J. A. Hynek y Claude Poher so-
bre el asunto. Desgraciadamente, en marzo de 1979,
Gairy fue depuesto en un golpe de estado marxista (que
poco después motivaría la invasión de la isla por los nor-
teamericanos enviados por el presidente Reagan) y nun-
ca más se volvió a hablar del tema. Como apoyo a su ba-
talla por conseguir ser escuchado en las Naciones Unidas,
el primer ministro no dudó en utilizar la filatelia y fruto de
sus anhelos fue esta serie compuesta de tres sellos y una
hojita bloque (Y&T 827/29 + BF 73).
El sello de 5 céntimos presenta el ya tópico platillo
adamskiano a la derecha, mientras que en su lado iz-
quierdo aparece un grabado medieval sobre unas extrañas
figuras aéreas vistas sobre Alemania en 1561 y que al-
gunos ufólogos han querido considerar como ovni. El va-
lor de 35 céntimos muestra un radiotelescopio sobre un
exagerado fondo estelar (quizá como metáfora de las in-
vestigaciones SETI) y unas luces sobre la Luna con fecha
de 1950 en referencia a los “Lunar Transient Phenomena
(LTP) que la NASA llegó a investigar y cuya existencia ha
quedado recientemente confirmada en vídeo por algunos
astrónomos, como resultado de impactos meteóricos con-
tra la superficie lunar1. Por otro lado, también puede que-
rer referirse a los ovnis que habrían observados y filma-
dos supuestamente por la tripulación del Apolo 112. El
tercer sello recoge otro platillo flotando sobre una co-
lumna luminosa que le sale de la panza, imagen que aun-
que no fue descrita nunca por Adamski, ha proliferado en
la casuística; junto a él, una bola brillante de color blan-
co rojizo fechada en 1965. No he podido identificar a cuál
caso concreto podría referirse.
Finalmente la
hojita bloque nos
presenta una vista
de Manhattan con
el edificio de las
Naciones Unidas
y un retrato de Sir
Eric Gairy. Al fon-
do, sobre los ras-
cacielos de Nueva
el esc
é
ptico
otoño - invierno 2000
58
UN MARCIANO EN MI BUZÓN (I)
LA UFOLOGÍA Y EL
COLECCIONISMO DE SELLOS
background image
York (EE.UU.), puede verse flotando un platillo volante.
¿Premonición de la famosa abducción de Linda Napoli-
tano en noviembre de 1989, donde habría tenido un pa-
pel estelar el entonces Secretario General de las Naciones
Unidas, Javier Pérez de Cuéllar, quien supuestamente
también habría sido abducido en aquella ocasión?
Abrí este artículo afirmando que el primer ovni fila-
télico apareció en 1975. No es exacto. Esa fue la prime-
ra ocasión en que los ovnis aparecieron de forma clara y
definida, pero todos hemos oído hablar de esos ovnis que
aparecen en alguna fotografía, aunque el cámara no los
viera en el momento de tomarla.
A principios de la década de los setenta, distintos emi-
ratos del Golfo Pérsico dedicaron una profusión de sellos
a los vuelos Apolo, reproduciendo bastantes de ellos fo-
tografías tomadas durante tales viajes. Tras la revelacio-
nes públicas antes mencionadas2 sobre el acoso al que
fueron sometidos los vuelos Apolo por parte de los ovnis,
ningún ufólogo emprendedor podría dejar pasar esta
oportunidad. Tras un análisis exhaustivo de toda la evi-
dencia foto-filatélica disponible, apareció un sello emiti-
do en 1970 por Manamá (Y&T 30) de un valor facial de
10 dirhams, donde podía verse a un astronauta del Apo-
lo 12 colocando unos paneles para captar el viento solar.
A su izquierda aparecen, inconfundibles, dos puntos lu-
minosos que no pueden ser otra cosa que ovnis.
Deberían pasar
casi 15 años antes
de que los plati-
llos volantes vol-
vieran a aparecen
en el mundo de la
filatelia. Fue en
1992, dentro de
una serie de hoji-
tas-bloque emiti-
das en las islas Maldivas, bajo el título genérico de “Mis-
terios del Universo”. Fueron tres las dedicadas al
fenómeno ovni.
La primera
nos presenta un
ovni en forma de
platillo con tres
luces hemisféri-
cas de distintos
colores saliendo
de un agujero ne-
gro, ilustrando la
hipótesis de que
tales cuerpos astronómicos pudieran facilitar el viaje in-
terestelar. La segunda pretende ilustrar la visión funda-
cional de Arnold, pero aunque menciona que éste obser-
vó un grupo de nueve aeronaves en forma de disco
desplazándose a gran velocidad, sólo dibuja un único pla-
tillo volador con cúpula, brillando con tonos dorados so-
bre un fondo montañoso... repitiendo el equivocado cliché
de que los objetos vistos
por Arnold tenían forma
discoidal, cuando más
bien eran como el tacón
de un zapato y vistos a
gran distancia. La últi-
ma hojita reconstruye
el famoso avistamiento
del capitán Coyne,
quién tuvo un encuen-
tro cercano con un ovni
en octubre de 1973
cuando pilotaba un he-
licóptero sobre Mans-
field (Ohio)... aunque si
hemos de creer a Philip
Klass se habría tratado
de un simple meteorito entrando en la atmósfera terrestre.
La pequeña república de San
Marino celebra anualmente desde
hace varios años un Simposium In-
ternacional de Ufología, y con oca-
sión del quinto, en 1997 emitió un
sello con un valor facial de 750 liras
y diseñado por Franco Filanci. En
el mismo aparecen varias personas
mirando a un cielo azulado pero
donde aparecen el Sol, la Luna, Sa-
turno, algún meteorito y un par de platillos también con
forma de Saturno, intentando ilustrar la curiosidad del ser
humano por el Universo y sus misterios.
Acabaremos este recorrido con las tres series más re-
cientes:
Tanzania ha dedica-
do en 1999 dos hojitas-
bloque a sendos casos
famosos: el ya reiterado
avistamiento de Kenneth
Arnold (esta vez el ilus-
trador se acerca mucho
más a la descripción ori-
ginal), y el incidente que
condujo al fallecimiento
del capitán Mantell en
1948 mientras perseguía
a un supuesto ovni (años
después se confirmaría
que se trató de un enor-
me globo “Skyhook”).
Asimismo ha emiti-
do dos bloques con seis
valores cada uno, ofre-
ciendo una auténtica
galería de ovnis con las
más diversas formas pero bastante fieles a las descrip-
ciones originales. La titulada “Ovnis sobre las Américas”
otoño - invierno 2000
el esc
é
ptico
59
background image
recoge desde el platillo
fotografiado en McMin-
ville en 1950 al último
filmado en 1991 sobre
México capital, y al pie
se presenta una versión
bastante crédula del su-
puesto ovni estrellado
en Roswell. La segun-
da, con el contradictorio
título de “Platillos Vo-
lantes No Identifica-
dos”, ilustra desde el
platillo de Adamski
hasta el ovni triangular
visto sobre Bélgica en
1990 y que ha pasado a
convertirse en la forma
de moda para este tipo de aeronaves, en detrimento del
platillo clásico; al pie, se incluyen diversos comentarios
sobre la famosa “Área 51”.
Las nuevas repúblicas ex-soviéticas no podían tardar
en subirse al carro de este negocio filatélico y así en
1999, la república de
Turkmenistán ha emiti-
do una hojita con seis
valores. Los dos prime-
ros ilustran el transbor-
dador espacial nortea-
mericano y el futuro
transbordador europeo
(todavía en fase de dise-
ño), pero los cuatro va-
lores restantes recogen cuatro clarísimas fotografías de ov-
nis... realizadas por el famoso contactado suizo Billy
Meier. Presentamos la serie
en su sobre de primer día de
emisión, con el matasellos
alegórico y otro reluciente
platillo volador como reclamo.
Más sorprendente resulta
que un país como Bélgica de-
dique uno de sus sellos a nuestra temática. Pues bien,
acaba de aparecer este valor de 17 francos donde apare-
ce un típico platillo en el que incluso pueden apreciarse
unas patas de aterrizaje. Se trata una imagen real, pero no
corresponde a una nave extraterrestre. Se trata de una de
las obras del visionario artista e inventor belga conocido
con el pseudónimo de Panamarenko. Quizá tengamos oca-
sión en esta sección de tratar la imaginería platillista en
el arte.
é
Luis R. González Manso
Próxima entrega: Abducciones.
NOTAS
(1) UFO Historical Review, número 6, Marzo 2000,
“TLPs: Proven beyond doubt”, http://www.cufon.org/
uhr/uhr6.htm
(2) Consultar: “Los incidentes ovni del Apolo 11”, por Ja-
mes Oberg, UFOs and Outer Space Mysteries (Donning
Press, Virginia Beach, VA, 1982), Capítulo 3.
el esc
é
ptico
otoño - invierno 2000
60
El autor desea agradecer la colaboración de Gian-
carlo D’Alessandro, ufólogo italiano editor del
PHILCAT. Catalogo di UFOfilatelia disponible en la
red: http://web.tiscalinet.it/Giada/
Asimismo, agradecería la colaboración de los lecto-
res para ampliar la casuística filatélico-ufológica.
CHISTE
MAGUFO, EL MAGO
Pedro Mirabet